Germán Fleitas Núñez: La
Escuela Militar de Venezuela en La Victoria
Domingo, 7 julio 2013
Por el clarín
Germán Fleitas Núñez, el cronista de La Victoria, este
domingo repasa los detalles históricos de la Escuela Militar en la ciudad de La
Victoria.
Siete años antes de morir el General Juan Vicente
Gómez, se produjo en la ciudad de Caracas, un movimiento subversivo contra el
gobierno, protagonizado por los jóvenes estudiantes, militares y trabajadores,
integrantes de la llamada Generación del 28, algunos de cuyos miembros seguían
hasta hace muy poco, ochenta años después, rigiendo los destinos de
nuestro país. Entre los comprometidos en el alzamiento, figuraban oficiales,
profesores y cadetes de la Escuela Militar de Venezuela.
Como parte de las medidas adoptadas por el régimen
para debelar la sedición, el viejo caudillo desmilitarizó el gabinete
ejecutivo, nombrando un cuerpo de ministros formado por puros civiles y
decidió, el envío de los estudiantes en calidad de arrestados, a la ciudad de
La Victoria.
Para ese entonces aún no se había terminado de
construir el “Cuartel Mariano Montilla”, obra decretada por el General Cipriano
Castro y paralizada por el General Gómez durante 27 años, por lo cual hacía las
veces de cuartel el “Palacio Castro” o Palacio de Campoelías, situado al frente
de la Plaza del mismo nombre. Cuando en los libros de historia militar de la
época se habla del cuartel de La Victoria, no se refieren al “Mariano Montilla”
sino al palacio de Campoelías”.
La imponente edificación hoy sede de la Alcaldía y
futuro Museo de Historia de la ciudad, había sido construida por el General
Castro para su residencia particular y a su caída, el gobierno gomista le había
cambiado el nombre original de “Palacio Castro” por el de Palacio Campoelías,
en homenaje al héroe Vicente Campoelías, español patriota salvador de La
Victoria, el 12 de febrero de 1814 y la había destinado para asiento de la
Fuerza Armada acantonada en la histórica ciudad. Coincidencialmente, era
Director de la Escuela Militar, el Coronel Elías Sayago, quien diez años antes
en su condición de Comandante Militar de La Victoria, había tenido a su cargo
la restauración del mencionado Cuartel y cuya actuación posterior, lo elevaría
al importante empleo de Prefecto de Caracas.
Al traslado del Cuerpo de Cadetes a La Victoria,
siguió la eliminación de la Escuela Militar, hecho que se produjo de derecho,
el día 19 de abril de 1928, mediante un escueto resuelto del Ministerio de
Guerra y Marina que decía: “Por disposición del General Juan Vicente Gómez, se
declara clausurada la Escuela Militar”. Firmaba el decreto el Dr. Carlos
Jiménez Rebolledo, distinguido abogado, quien siendo un civil ejerció el
cargo de Ministro de Guerra y Marina durante 17 años.
La medida desalentó a los oficiales progresistas del
ejército, desaliento este que fue mayor, cuando por vez primera desde su
creación, en ese año de 1928 no egresó ningún oficial graduado de la Escuela,
creando un vacío en la provisión de conductores calificados para nuestro
ejército.
Sin embargo, aun cuando la Escuela estaba oficialmente
eliminada, los alumnos seguían recibiendo clases gracias a que por sugerencia
del general López Contreras, junto con el cuerpo de cadetes, se trasladó a la
ciudad el cuerpo de profesores y actuaban “de hecho” como si la institución
existiera. Era la primera vez que funcionaba nuestra “alma mater” militar en
tierra aragüeña, pero no sería la última; posteriormente, luego de su
reestructuración, funcionaría en Ocumare de la Costa y en Maracay. En diciembre
del 28 el general Gómez preguntó: “Eleazar, donde están los muchachos de la Escuela
Militar”? (como si no supiera). “Los tengo en el cuartel de La Victoria,
mi general, se están portando muy bien y han seguido recibiendo clases”.
“Entonces vamos a reabrir la Escuela”.
La suspensión duró menos de ocho meses. El General
Gómez le ordenó al Ministro doctor Jiménez Rebolledo, la creación de una
“Escuela de Aspirantes a Oficiales” con sede en Caracas, la cual vendría a ser
de hecho la continuación de la desaparecida Escuela Militar. El
decreto de creación de esta institución es de fecha 13 de diciembre de
1928. Posteriormente se transformó en Escuela Militar y Naval,
hasta que fueron separadas ambas disciplinas. Entre los estudiantes que
vinieron a nuestro viejo Palacio, algunos a la vuelta de los años, tendrían
destacada figuración en la vida militar y política venezolana, llegando
inclusive algunos de ellos a presidir la República, otros a ser miembros de los
gabinetes ejecutivos en sus condiciones de ministros, otros a ser Comandantes
de Fuerza y muchos de ellos, figuras estelares en la llamada Revolución de
Octubre, en los hechos que condujeron al derrocamiento del Presidente Rómulo
Gallegos, a la instauración y derrocamiento de la dictadura y a la posterior
institucionalización de la democracia en Venezuela.
Tulio Moreno Sánchez
No todos los
egresados de la Escuela vinieron a La Victoria pero sí la mayoría. Veamos
algunos nombres: Juan Pérez Jiménez, Rafael Virgilio Vivas, Héctor Márquez
Pérez, Luis Amaya Castro, el futuro Ministro de Educación Néstor Prato Chacón,
Alejandro Morales Useche, Pedro Rincón Torres, José A. Monsalve, Tulio Moreno
Sánchez, Marcial Dávila Newman y Zoilo Delgado Díaz, quienes egresaron de la
Escuela en 1929.
Pedro Loreto Quintana Mayol, Gilberto Antolinez
Ayesterán, Jesús Raúl Parra García, José M. Espinoza Aguilar, el futuro
General Rómulo Fernández, Rafael Arraez Morles, José Rosario Rojas Gómez,
Francisco Maldonado Vivas, Víctor T. Arraiz Cordero, Rodolfo Aguilar, Ignacio
Ramírez Espejo, Ricardo Salas Vilona, Blas Menda León, José A. Dávila Paredes y
José R. Guerrero, egresados en 1930.
Ya como graduados de la Escuela Militar y Naval,
Marcos Evangelista Pérez Jiménez, Mario Vargas Cárdenas, el valiente Coronel
J.M. Gámez Arellano, defensor de la dignidad militar y progresista Gobernador
de Aragua durante la democracia, Eduardo Araque Páez, José León Rangel
Barrientos, Moisés Méndez Moncada, Ramón Peraza Manuitt, Urbano Briceño, Evelio
A. Roa Castro, Luis Brea Boyer, José González Hernández, José Daniel Vera
Custodio, casado luego con una distinguida victoriana, Marcelino Rangel
Barrientos, Pedro A. Bracho Urdaneta, Luis A. Colmenares Gallegos, Enrique
González Pachano quien regresó a La Victoria como Comandante del Cuartel
Mariano Montilla y fundó familia entre nosotros y tres oficiales de la Marina
uno de los cuales sería Presidente de la República y otro Ministro:
Antonio José Romero Osorio, Wolfgang Larrazábal Ugueto y su hermano Carlos Larrazábal
Ugueto. Entre los alumnos de menor edad figuraban Luis Felipe Llovera Páez,
Luis E. González Lugo, Manuel Ojeda Guía, Félix Román Moreno Huérfano, Rodolfo
León Portillo, Luis F. Prato Ramírez, José L. Pérez Labrador, Teresio Contreras
Vivas, Luis Crespo Rojas, Gonzalo Balsa, José Tirado Madríz, Rafael A.
Martínez, y los oficiales de la Marina: Rafael Quiroz Hernández, Alfredo Dao
Guédez y Jesús H. Hernández Vargas.
Fue corta la estadía de la Escuela Militar en La
Victoria pero los oficiales de las promociones mencionadas con quienes tuvimos
la suerte de conversar alguna vez sobre el tema, recordaban con cariño y mucha
nostalgia su paso por la histórica villa; recordaban a familias victorianas y
especialmente a muchachas y muchachos que fueron sus amigos de juventud.
No es la única vinculación de la actual Academia
Militar de Venezuela con La Victoria; antes, desde nuestra tierra, el
General Santiago Mariño Libertador de Oriente, influyó notablemente para el
establecimiento de la institución y hoy en día, desde 1984, la Virgen
Inmaculada Concepción de La Victoria, “La Virgen Vencedora”, es la Patrona de
la Academia Militar de Venezuela. Por cierto, correspondió al General de
División José Antonio Olavarría Jiménez, en su condición de Comandante General
del Ejército, venir a la ciudad a presidir el homenaje a la Virgen, con motivo
de su designación como Patrona de la Academia. El General Olavarría Jiménez es
nieto del Dr. Jiménez Rebolledo, Ministro de Guerra del General Gómez. Otra
vinculación que se proyecta hacia el futuro es que en los planes de
descentralización de la Academia Militar de Venezuela uno de sus núcleos del
interior, funcionará en nuestro imponente Cuartel Montilla.
Hemos propuesto a las autoridades de la Academia, la
colocación de una placa de mármol en el viejo Palacio, para que las actuales y
futuras generaciones sepan, que además de escenario de las más brillantes
acciones guerreras de nuestra historia militar, La Victoria fue también sede
del “alma mater” militar, en cuyas aulas se forman hoy los futuros conductores
de nuestro ejército nacional.